A medida que Santiago crecía, el Cuerpo de Bomberos de la ciudad requería de más Voluntarios para cumplir su labor. Los vecinos del Barrio Yungay, encabezados por Aniceto Ízaga, se organizaron para formar una nueva Compañía: la Novena, y así responder a las necesidades santiaguinas.
Esta nueva Compañía de Agua se formalizó con fecha 4 de junio de 1892 y hasta hoy trabaja fielmente por sus conciudadanos. Fue de su preocupación formar a jóvenes con espíritu de servicio, por lo que en 1996 nace la Brigada Juvenil de la Novena Compañía, la que traspasa la técnica y tradición bomberil que enorgullece a la Novena.
Estuvieron entre sus filas Guillermo Pérez de Arce y el primer embajador de Chile en Washington, Santiago Aldunate Bascuñan. Por la Novena en el correr de su historia, han pasado más de 1.100 voluntarios.
La Novena se ha especializado en incendios estructurales y edificios de altura y para entregar un mejor servicio, gracias al esfuerzo de la Institución y de la Compañía, actualmente contamos con una moderna bomba americana que nos permite ejecutar nuestra labor de manera tecnológicamente más apropiada, con el compromiso de proteger las vidas y bienes de quienes conforman el patrimonio de nuestro querido Barrio Yungay.