En 1950 la Novena aún tenía el “Viejo Cuartel” y la bomba Mack-Hale estaba recién llegada. Los bomberos de aquellos tiempos usaban su casco de parada, vestían cotonas de cuero y usaban toalla blanca al cuello, una época romántica del servicio bomberil.
Ese año, un 12 de Junio, Eduardo Méndez de 21 años ingresa a la Novena, a una disciplina que solo los valientes asumen voluntariamente. Como todo joven bombero ingresa a la Guardia Nocturna.
Luego en 1955 sus compañeros ven en él capacidades de liderazgo y es elegido Teniente 2°. Era 1956 y siendo aún oficial de mando y con solo 26 años debe asumir la muerte de un compañero en acto del servicio, Benjamín Fernández Ortiz en el incendio de Roman Spech con Nueva Matucana.
En 1958 es nombrado Voluntario Honorario y elegido Teniente 1°, además participa en el equipo ganador del “Premio Yungay”, competencia interna de la Compañía.
A principios de los 60 despide el “Viejo Cuartel”, y posteriormente participa en la recepción del actual cuartel. Además participa en la llegada de la nueva bomba, la Berliet, primera máquina con cabina techada y un estanque con gran capacidad.
Era 1973, siendo ya un bombero con experiencia participa en el Incendio del Palacio de la Moneda. Queda registro en su hoja de servicio por la relevancia histórica de ese hecho.
El año 2015 califica su premio por 65 años de servicio, honor que pocos bomberos han tenido. Todos aquellos compañeros con los que había compartido en sus tiempos ya habían partido.
Ayer 19 de mayo de 2020, en una fría mañana de otoño y tras 69 años de servicio a su compañía y la comunidad, Eduardo Méndez Sepúlveda fallece siendo el voluntario más antiguo de su querida “Bomba Yungay” con una antigüedad de 69 años, 11 meses y 9 días.

Juan Eduardo Mendez Sepulveda, descansa en paz.

 

Video de nuestra guardia rindiendo honores al Voluntario Honorario Sr. Eduardo Mendez Sepúlveda (Q.E.P.D.):

Video del homenaje realizado por la Institución y discurso de nuestro Director:

 

Fotografía de la Guardia de la Segunda Compañía «Bomba Esmeralda» rindiendo honores al cortejo fúnebre: